La nube de polvo ha alcanzado alturas de 3000 metros, y ha ocupado 80 Km de ancho
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Phoenix
se ha convertido en una sombra borrosa de color marrón. Los coches y
los edificios se han cubierto de polvo debido a una tormenta de arena que cruzó la metrópoli estadounidense la pasada noche.
La gran tormenta ha reducido drásticamente la visibilidad, y ha obligado a suspender todos los vuelos de entrada y salida del aeropuerto de Phoenix; además, la nube de polvo ha dejado sin electricidad a unas 9.400 personas.
El Servicio Meteorológico Nacional de
Phoenix, ha dicho que hay una ligera posibilidad de que acechen
tormentas eléctricas esta noche. La tormenta del martes ha formado parte
de la temporada del monzón de Arizona, que suele comenzar a mediados de junio y dura hasta septiembre. |
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