El fenómeno provicó el martes la aparición de auroras sobre el norte de Europa
|
El viento solar fluye de los agujeros en la corona del Sol (las manchas oscuras, a la derecha)
El pasado 14 de febrero ocurrió la que ya se conoce como la «tormenta de San Valentín», una potente erupción solar que apuntaba directamente a la Tierra. La NASA detectó una llamarada masiva de clase X,
la más potente que es capaz de emitir el Sol y la mayor detectada en
cuatro años. El fenómeno se dejó sentir en nuestro planeta en forma de
espectaculares auroras boreales en el norte y algunos fallos en redes
chinas de satélites, pero, afortunadamente, poco más. Los científicos advirtieron de que se producirían más tormentas semejantes y no se equivocaron. El día 24 otra llamarada fue grabada por los instrumentos de una sonda de la NASA y ayer martes, según informa Spaceweather.com, el Sol envió otro de sus peligrosos saludos. Una corriente de viento solar alcanzó el campo de magnético provocando la aparición de auroras en Irlanda del Norte, Letonia, Noruega y Suecia. |
Leer el artículo completo. Haz Click Aquí |
|